Envases y su reciclaje

¿Qué envases NO se pueden tirar al contenedor amarillo?

  • Envases de papel y cartón
  • Cintas de vídeo
  • Pañales
  • Cuerdas
  • Residuos sanitarios
  • Medicamentos
  • Calzado y ropa
  • Perchas de plástico
  • Plásticos de embalaje
  • Juguetes
  • Persianas
  • Botes tipo Pringles
  • Mecheros
  • Bolígrafos
  • Cables
  • CDS
  • Cubos de plástico
  • Vajilla
  • Bandejas de plástico
  • Botes de barro
  • Tapones de corcho
  • Vasos de papel y tarrinas de papel
  • Papel plastificado utilizado en carnicerías y pescaderías
  • Tupperwares
  • Capsulas de aluminio de café
  • Moldes de silicona para dulces y otros postres
  • Termos
  • Sacapuntas

¿Qué envases SÍ se puede tirar en el contenedor amarillo?

  • Envoltorios pequeños de caramelos, chicles y bombones
  • Cajas metálicas de pastas, bombones y otros dulces
  • Envases de yougurt
  • Envases metálicos de nata montada
  • Tarrinas de mantequilla
  • Envoltorios de aluminio de mantequilla
  • Tapas de los envases de cristal
  • Tapones de plástico
  • Bandejas de aluminio
  • Papel film y papel de aluminio limpio
  • Aerosoles
  • Chapas de botellas
  • Botellas de plástico
  • Abrazaderas de plástico
  • Latas de refresco y conservas
  • Bricks de leche, zumos y sopas
  • Productos de limpieza
  • Botes de plástico de geles de baño, colonias, desodorantes y champús
  • Bandejas de corcho blanco
  • Bolsas de aperitivos y golosinas
  • Bolsas de plástico con símbolo de reciclaje (bolsas basura no)
  • Tubos de pasta de dientes

¿Qué es el contenedor amarillo?

El contenedor amarillo lleva 20 años en funcionamiento en España, de media puede encontrarse un contenedor amarillo por cada 117 habitantes.

A pesar de que ha habido una muy buena evolución y cada año aumenta la cantidad de reciclaje de envases de plástico, briks y latas por habitante, un tercio de la población sigue sin saber con certeza dónde va cada tipo de residuo. Por otro el otro lado, aunque muchas veces pensemos lo contrario, el 80% de los hogares y ciudadanos reciclamos de manera activa y separamos nuestros residuos a diario. En su web Ecoembes también resuelve dudas sobre el reciclaje de los envases de plástico.

Proceso de reciclaje

Todos los envases que van a parar al contenedor amarillo son transportados a las plantas de selección, y de allí a sus respectivos recicladores. De manera más desarrollada:

Primero se separan los materiales según sean aptos o no aptos. Por ejemplo, las etiquetas, los restos o tierras de algún tipo se desechan. Este proceso puede ser algo complejo, ya que se separan al menos tres fracciones: metales y plásticos. Una botella de agua sería plástico PET, una lata de refresco sería metal y una bolsa de patatas sería plástico mezcla.

Por otro lado, también se segregan según los colores. De esta forma se optimiza el uso de colorantes.

Las piezas se rompen y trituran en trocitos pequeños para facilitar el tratamiento.

Después se lavan, cubriendo los trozos con agua y dejando que las impurezas más densas queden abajo.

Se seca y centrifuga, eliminando cualquier otra impureza que haya podido quedar.

Se homogeneiza con un proceso mecánico para lograr un color y textura uniforme.

Después vuelve a depurarse el material de impurezas y se le da la forma y el color demandado, pasando por los respectivos controles de calidad.

Curiosidades

Solo con 6 briks de reciclaje puede hacerse una caja de zapatos, con 40 botellas de plástico de reciclaje pueden convertirse en un forro polar y con 80 latas de bebidas de reciclaje pueden transformarse en una llanta de bicicleta. También con 8 botes de conserva de reciclaje pueden tener una segunda vida como olla de cocina, con 22 botellas de plástico una camiseta y 550 latas pueden ser una silla.

Además, cada envase reciclado tiene su impacto en la lucha contra el cambio climático y la contaminación, ya que reciclando 6 latas o briks se contrarresta la emisión de 10 minutos de un tubo de escape.

Para más dudas sobre reciclar, también puedes visitar nuestra guía de reciclaje, haciendo clic aquí